El mecanismo “requiere un nuevo tipo de programa de visa laboral que no mantenga a todos los trabajadores en un estatus temporal permanentemente”.
WASHINGTON.- Empresarios y sindicalistas acordaron hoy principios compartidos sobre una reforma migratoria integral que analiza el Congreso de Estados Unidos, aunque reconocieron que todavía van a “medio camino” del proceso.
La declaración conjunta fue suscrita por el presidente de la Cámara de Comercio de Estados Unidos, Thomas Donohue, y el presidente de la Federación Estadunidense del Trabajo y Congreso de Organizaciones Industriales (AFL-CIO), Richard Trumka.
El acuerdo, logrado luego de meses de negociaciones, estableció que los trabajadores estadunidenses deben tener acceso prioritario a puestos de trabajo disponibles, en especial los de comunidades desfavorecidas.
En segundo lugar, cuando los empleadores no puedan llenar vacantes con ciudadanos estadunidenses, tengan facilidades para la contratación de extranjeros sin pasar por un proceso “difícil e ineficiente”.
“Nuestro reto es crear un mecanismo que responda a las necesidades de los negocios de una manera que sea impulsada por el mercado y, al mismo tiempo, proteja los salarios y condiciones laborales de los trabajadores estadunidenses e inmigrantes”, señaló el acuerdo.
Precisó que, entre otras cosas, el mecanismo “requiere un nuevo tipo de programa de visa laboral que no mantenga a todos los trabajadores en un estatus temporal permanentemente”.
Asimismo, que “proporcione una movilidad laboral que dé acceso prioritario a puestos de empleo disponibles a trabajadores estadunidenses y se ajuste automáticamente conforme la economía estadunidense se expanda y contraiga”.
En tercer lugar, el acuerdo señaló que empresarios y sindicalistas tienen que “arreglar el sistema de modo que sea mucho más transparente”, lo cual requiere el uso de la tecnología para diseñar un proceso viable sobre futura escasez laboral.
“Reconocemos que no existe una solución sencilla a este problema”, indicaron los firmantes.
“Concordamos en la necesidad de crear un departamento profesional dentro de una agencia ejecutiva federal políticamente independiente, como el Departamento de Estadística Laboral, para informar al Congreso y público sobre estos temas”, subrayaron.
Donohue y Trumka reconocieron en el acuerdo que los mecanismos para evaluar el mercado laboral para admitir a trabajadores extranjeros y el reclutamiento de trabajadores estadunidenses para empleos temporales y permanentes son disfuncionales o inexistentes.
Indicaron que es necesaria una entidad para que informe al Congreso y al público sobre estos temas junto a un sistema de visas para trabajos de baja destreza que responda a las necesidades de los empleadores, mientras se protege los salarios y las condiciones laborales de los trabajadores nacionales o extranjeros.
“Vamos a medio camino en este proceso no en el tramo final, y nos comprometemos a seguir trabajando juntos y con nuestros aliados y representantes en el Congreso para finalizar una solución que favorezca a este país que todos queremos”, afirmaron.
Un grupo de ocho senadores presentó un plan bipartidista de reforma migratoria que incluye el camino a la ciudadanía para unos 11 millones de indocumentados, el cual cuenta con el apoyo de la Casa Blanca, pero el debate continúa sobre los futuros flujos migratorios.